Ella hace su ronda nocturna,
vigila las calles oscuras,
cubiertas por el manto de flores 
trazos irregulares guían su húmeda travesía
Desde aquí, tras la ventana 
leyendo noticias, escuchando canciones 
atorados en el tráfico, etéreos como las nubes
te ignoramos mientras caen desde los árboles 
para encontrarnos pequeños 
imperceptibles a tus ojos Luna
y descubrirnos grandes imaginándote
pestañear mientras caminas 
sobre el perfume morado 
que barre la lluvia y el día. 
 

 
 
 
 
 

